Clubes de Barrio tienen su Ley
Diez mil instituciones deportivas podrán acceder a beneficios como tarifa social, presupuesto participativo para obras y privilegios o reducciones en materia tributaria. Entrevistamos al diputado nacional del Frente Para la Victoria, Edgardo Depetri, principal impulsor de esta Ley.
Respaldo del Proyecto y Deporte Social
“Los verdaderos constructores de esta Ley Nacional de Clubes de Barrio son los propios Clubes de Barrio que participaron de los más de 50 Foros y que desde hace muchos años están sosteniendo a los pibes. Aparece con mucha fuerza de nuevo el club de barrio, como una institución fundamental”, sostuvo Depetri sobre quienes acompañaron y serán beneficiados por esta Ley.
El club de barrio es una de las instituciones que nuclea a la comunidad, en la cual los más chicos pueden formarse como personas, aprender valores, ser incluidos y sentirse parte de un grupo, entre otras tantas funciones. Es el lugar ideal para los chicos. Depetri compartió nuestro pensar: “El deporte social pone a los pibes donde tienen que estar, en los clubes y no estén en las calles, o en las cárceles. Tampoco el futuro está en decirles a los pibes que vayan a la colimba. Los clubes de barrio respaldan este proyecto porque entienden que las instituciones deportivas barriales puedan progresar y seguir conteniendo y formando sanamente a los pibes y pibas de nuestra localidad y de todo el país”.
Requisitos para los clubes que quieran acceder a estos beneficios:
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Poseer personería jurídica vigente y domicilio legal en la República Argentina.
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Acreditar una antigüedad mínima de tres (3) años desde su constitución formal.
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Poseer una cantidad mínima de 50 asociados y una máxima de 2.000 socios al momento de la inscripción.
Los fondos deben ser destinados a:
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Mejorar las condiciones edilicias del club.
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Adquirir insumos o materiales para desarrollar o potenciar actividades deportivas o culturales.
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Contratar servicios para mejorar o facilitar el acceso de los socios a eventos deportivos o culturales.
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Contratar recursos humanos para la instrucción de deportes o en actividades artísticas.
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Capacitar a los directivos y trabajadores que desempeñen tareas en las entidades.
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Organizar actividades culturales o deportivas.
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Promover la difusión de las actividades que se realicen en las entidades.
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Promover programas de medicina preventiva garantizando el acceso a la información en salud.
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Establecer programas y estrategias de prevención primaria en materia de adicciones.
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Solicitar ante la autoridad competente el otorgamiento de la personería jurídica y la aprobación de sus estatutos sociales.
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Establecer medidas de seguridad de infraestructura y/o edilicias.
La Ley Nacional de Promoción a los Clubes de Barrio y Pueblo fue sancionada por el Senado de la Nación. El proyecto presentado por Edgardo Depetri y Diana Conti, diputados del Frente para la Victoria, fue aprobado y los clubes podrán gozar de múltiples beneficios. También es importante señalar que se creó la Unión Nacional de Clubes de barrio donde se va a hacer un censo de cada uno a lo largo y ancho del país para poder integrarlos a la nueva Ley.
En diálogo con La Argentina Olímpica, Edgardo Depetri sostuvo los principales ejes en los que se basó la Ley: “Los puntos más fuertes de la Ley son la titularidad de todos los terrenos, de todo el dominio de los clubes porque hay muchos clubes asentados en terrenos fiscales ya sea nacionales, provinciales o municipales y otros privados en litigio. También prevemos tarifa social para los clubes en lo que es luz, agua y gas. Planteamos la inembargabilidad de sus bienes, una moratoria administrativa contable para poder formalizar y estamos discutiendo un presupuesto participativo con los clubes para que puedan hacer obras”.
Proceso histórico
Estas instituciones no son nuevas en nuestro país. Datan desde las primeras inmigraciones europeas por estas tierras y se fueron consolidando durante el proceso de industrialización fomentado por el gobierno de Juan Domingo Perón que comenzó en 1946. El diputado nacido en Santa Fe lo detalló: “Queremos visibilizar a los clubes de barrio un poco separándolos de la cuestión más profesionalizada, mas federada. Son clubes que en su historia se constituyeron con los proceso de inmigración en Argentina, donde no solo se hacían actividades deportivas sino que eran centros de integración cultural, espacios comunitarios de formación y también eran centros de debate tanto comunitarios como de coyuntura nacional”.
Y ahondó en su análisis: “Hay otro salto de los clubes de barrio que fue durante el proceso de industrialización de la Argentina, durante el peronismo 45-55, ya que aparece como un derecho, como lo es el derecho a la educación, al trabajo, a la salud.
Una nueva conquista para el deporte. Un nuevo derecho para los más chicos. Pero por sobre todo eso está el fomento de más de diez mil instituciones que bregan por la contención, la inclusión, la participación y el desarrollo de los jóvenes como personas. Esos son los valores más importantes.
Los clubes comunitarios, aquellos que luchan día a día por sobrevivir, que realizan rifas y ollas populares para poder comprarle indumentaria a los chicos, los que hacen fiestas con el fin de que lo recaudado se destine a un viaje, y así los jóvenes puedan jugar, disfrutar y compartir, esos van a ser los ayudados.
Más de 10 mil instituciones deportivas se verán beneficiadas de entre 50 y 2 mil socios. El objetivo está planteado de antemano y así lo reconoció el Diputado Nacional: “Tenemos un sueño que queremos cumplir. Queremos que los pibes no se cambien más atrás de un árbol, queremos que todos los clubes tengan vestuario y agua caliente para que los pibes se puedan bañar después que hacen su práctica deportiva”.
Empieza una mirada más clara sobre el deporte como un derecho de los pueblos. Y no por casualidad, en ese proceso de industrialización donde se abre una fábrica, aparece la escuela y aparecen los clubes. Los clubes que se organizan mediante la participación popular y empieza a aparecer una nueva institucionalidad que viene a unificar todas las expresiones sociales culturales y deportivas de la Argentina”.
Fotos: www.radiocooperativa.com.ar ; Frente Transversal Nacional y Popular – Prensa ; www.desarrollosocial.gob.ar
El camino se está abriendo para estas instituciones. También les servirá en gran medida que se promulgue la actualización de la Ley del Deporte, hecha en 1974 pero que quedó obsoleta en varios puntos. La inclusión de mayor cantidad de pibes, más el aporte de nuevos socios revitalizará a estos clubes que están tomando un poco de respiro luego de transitar por muchos años, sobre todo en los '90 y principios de esta década, caminos bastante arenosos.
